Las casas de madera y su buen comportamiento al frío

Dada la actualidad del tema “frío”, que afecta a todo el país, resulta conveniente comentar porqué las casas de madera tienen un comportamiento superior en cuanto a aislación térmica, lo que hace que sean las más difundidas en los países de las latitudes más cercanas a los polos.
Primeramente debemos considerar que, a lo que denominamos “casa de madera”, no son “construcciones precarias”, sino edificios que cumplen con las normativas correspondientes. No tiene mucho que ver su tamaño o categoría social, el comportamiento será de muy buena prestación si están construidas “como se debe”.

ASPECTOS CONSTRUCTIVOS
Las casas de madera pueden ser de madera sólida, como las cabañas de troncos o de bloques, o bien las de una estructura de madera que luego se completan con capas, que, por ser las más difundidas, como el caso del Wood frame, nos referiremos a ellas. Estas se construyen de a capas, “como de cebolla”, lo que permite que entre ellas se tenga capas de aire, lo que posibilita contar con muros, techos, e incluso pisos, ventilados, generando una envolvente de aire, lo cual no es sencillo de lograr con otros sistemas. (ver en la imagen).

EL AIRE COMO AISLANTE
Un concepto importante es que el “confinar aire” genera aislación, por lo que muchos aislantes se basan en materiales livianos que contienen aire en su interior, (el plástico burbuja es un ejemplo de ello).
En la casa, la capa de aire de los muros exteriores, por debajo del acabado, si se calienta por encima de 10°C comienza a moverse en forma ascendente, por convección, y se libera, lo que hace que en verano sean frescas, y por el contrario, en invierno con temperaturas bajas se queda inmóvil, generando una capa aislante, como es el caso del aire del hielo de los iglúes.

LOS AISLANTES
Entre los más usuales están la lana de vidrio, la lana de roca (de más fácil manipulación), el telgopor (debe estar protegido del fuego), e incluso en Europa hay tableros de fibra de madera como el MDF pero de muy baja densidad LDF. El INTI e INTA hace tiempo probaron tableros livianos de fibra de corteza de eucalipto. Últimamente se está difundiendo la celulosa proyectada, que es como un “papel picado”, tratado contra el fuego y ataques de hongos e insectos, que se proyecta dentro del muro y/o ático (hay ejemplos en la zona). En Inta Concordia se ha probado un aislante con cartón corrugado reciclado-tratado , que tiene tubos de aire, pensando en soluciones de bajo costo y de fácil acceso a la personas de bajos recursos (se aplicó en parte de una casa del Inta y en una escuelita no formal, Los Pasos, en el Barrio Llamarada). Merece citarse la actual aparición en el mercado de la lana de oveja como aislante. Si bien es algo ancestral, aparece recientemente de la mano de la bioconstrucción, que busca soluciones naturales. (La lana es el único pelo hueco, con aire en su interior) Es tratada con boro contra el fuego y ataques.

DATOS TÉCNICOS DE AISLACION
Todos los materiales, incluso el aire, tienen un coeficiente de resistencia al paso de la temperatura (coeficiente K), cuanto menos resistente, menos aíslan, como el caso del metal. Por ello el cálculo de la aislación resulta de multiplicar el espesor del material de cada capa, incluso el aire, por su coeficiente de aislación. Es así que un cálculo general realizado por el recordado Arq. Jorge Barroso, señala que tomando como base un muro de ladrillo hueco, como el 100%, la aislación de un muro de madera sólida, como los troncos, aisla un 300% ( 3 veces más) , y un muro en capas típico de Wood frame, un 600% (o sea, 6 veces más), lo que indica que para logra igual aislación en mampostería los muros deben ser de mucho mayor espesor.
Cabe acotar que le sistema de entramado permite elegir libremente los acabados interior y exterior, a gusto del propietario (puede ser incluso ladrillo a la vista), pero según de que material se trate será su aislación total.
Vale el concepto que “lo que aisla del frío, también aisla del calor” por eso, tanto las heladeras, como las cocinas, tienen aislantes en sus paredes.

IMPACTO EN LA ECONOMÍA HOGAREÑA
El muro se comporta casi como “neutro”, o sea que no está caliente en verano, ni muy frío en invierno, lo que redunda en que sean fáciles de refrigerar,  y calefaccionar, por ello un menor gasto de mantenimiento de ese confort . los muros sólidos en verano se calientan y entregan al interior ese calor durante la noche, y por el contrario en invierno parte de la energía empleada para calentar la casa la absorbe el muro para igualar su temperatura con el ambiente. En una vivienda de madera en Inta Concordia, que no tiene ni calefacción, ni aire acondicionado, se midió junto a la UCU, la temperatura en el exterior e interior diariamente durante 2 años. Como datos extremos se tuvo que cuando afuera hubo en el invierno  -4 °C, la casa se mantuvo en 12 °C, mientras que en el verano con  36 °C, la casa estaba en 25 °C, y el gobierno pide que se ponga el aire acondicionado a 24°C….
Por ello se las menciona como “viviendas energitérmicas”, que exigen menor consumo de energía para refrigerarlas y calentarlas, y el mantenimiento de ese ambiente, lo que en definitiva redunda en menores gastos, y hasta mayor  independencia de energía.  Esta característica hace más accesible el confort a personas de menores recursos.

CERTIFICACION – ETIQUETADO
Finalmente, podemos comentar que este tema de ahorro energético es de especial atención para el gobierno nacional, el que desde el año 2018 exige en sus sus planes de viviendas sociales, que la categoría mínima aceptable sea la B, donde la máxima alcanzable es la A y la mínima la G, según se puede observar en la escala energética que traen diversos aparatos, como el caso de las heladeras. Esto trajo aparejado, que desde el año pasado se ha comenzado con el “etiquetado energético de las viviendas”, o sea, una certificación, que pone una vara de calidad, lo que brinda una medida de su comportamiento al usuario, y qu seguramente hará más competitivas a las viviendas de madera.

martinmiguelsanchezacosta@gmail.com