El abogado de Manzanares alertó por maniobras no investigadas en la causa Cuadernos

“La Justicia solo vio una parte del saqueo”
El defensor, Roberto Herrera, sostuvo que aún no se logró dimensionar el alcance completo del entramado ilícito: “Lo que está documentado es solo una parte del saqueo sistemático. La cantidad de dinero que circulaba era enorme y no todos los actores están identificados”, señaló.
Manzanares, que fue contador y hombre de confianza de la familia Kirchner en Santa Cruz, aportó detalles clave para el armado de la acusación contra Cristina Fernández de Kirchner, imputada por presunta jefatura de asociación ilícita, lavado de activos y defraudación al Estado. Su testimonio es considerado central para reconstruir la estructura que documentaron los cuadernos del chofer Oscar Centeno.
Las declaraciones del excontador también respondieron a las afirmaciones de la expresidenta, quien había sugerido que Manzanares fue “presionado” para convertirse en arrepentido, algo que él mismo negó rotundamente a través de su defensa.

El mecanismo narrado por Manzanares
Herrera brindó detalles sobre la operatoria que su cliente describió ante los tribunales. Según su testimonio, Daniel Muñoz, el fallecido secretario privado de Néstor Kirchner, realizaba viajes semanales a Río Gallegos con valijas repletas de dinero provenientes de supuestos pagos ilegales vinculados a la obra pública.
“Manzanares lo esperaba en el aeropuerto y juntos trasladaban los bolsos hasta la casa de los padres de Néstor Kirchner. Muñoz ingresaba solo y, alrededor de una hora después, salía con un bolso destinado a Manzanares”, relató el abogado.

El volumen de fondos involucrado era abultado. De acuerdo con la defensa, entre dos y tres millones de dólares por semana ingresaban al circuito financiero legal a través de operaciones realizadas por el propio Manzanares, considerando únicamente el flujo que manejaba Muñoz.